Cuerdas de Barriletes

Esta noche, nubes son voladas atrás del cielo

en cuerdas de barrilete hiladas de esperanzas tenues;

enrolladas sobre los carretes de la ansiedad que

todos sentimos el año pasado. Las nubes

se convierten en ventanas de vidrio esmerilado-

por ellas, la Luna del Lobo ilumina a formas

y sombras, pero no a colores ni detalles.

Solo podemos discernir cómo 12 meses pueden

sentir: no podemos verlos claramente.

 

¿Cómo se siente el abril, cuando cosas nuevas

despiertan para reclamar oportunidades

y chances perdidas? ¿Seré yo importante

a ti, en junio? ¿Caerán las bombas, en agosto?

¿Vendrá la cosecha de trigo, a tiempo

al mundo, en noviembre?

 

Soy también una aplicación imperfecta.

No siempre digo la verdad completa.

A menudo, tengo el orgasmo solo después

de que mi amante se ha vestido y me

había despedido con un beso; llevando

con él todas las preguntas que no le he

preguntado todavía, y todas a que quizás

él nunca responderá, también.

 

Digo a la gente que amo el silencio,

cuando lo que me captiva es la cacofonía

de canto de aves cada mañana.

 

Tengo pretensiones de ser llena de la

esperanza, pero yo temo a algo en cada nuevo

mes que viene enfrente de nosotros.

Especialmente esas bombas, que pueden

robar a mi mundo de ambos cantos

de pájaros, y orgasmos.

 

Digo con falsedad que odio a las mismas películas,

que tú. Elogio el arte de la persona de que

no confió en su autenticidad. Cuento al mundo

que tu solo eres un amigo, un socio,

alguien con que coincidentemente comparto

unos pocos intereses no-amenazante.

 

Te juro que estoy muy bien en mi soledad,

con mis miedos en este paisaje bellamente

fracturado, con sus nubes de carrera. Lo que

no digo es tanto yo deseo que alguien como tu

me invitaría afuera para jugar, para volar barriletes

entre tu propio espacio solito una noche.

Y después, soñar mi esperanza y mi persona

otra vez entre una historia de amor de las

proporciones de las Himalaya en la luz

de la luna. Cada peña, grieta, y triunfo

visible a los ojos y manos y corazones

que se sienten con más precisión

a través de vidrio esmerilado

en la obscuridad.