no es poema de amor

inspirada como respuesta a un poema escrito por un amigo y poeta de nuestra ciudad

Querido amigo, tráeme las rosas

que ella te dijo, eran incorrectas para la mesa,

no aptas para la casa; inquietantes

por la impresión equivocada

que ellas podrían dejar como tantas

insinuaciones de cosas de que la gente

simpática, simplemente, no piensan.

 

Tráemelas; las arreglaré con goza

in cristal cortado o piedra tallada

en mi cocina; su alguien me pregunte, diré,

ellas son regalo de un amigo, sin ironía.

Diré, ellas son de una dimensión

donde no hay belleza incorrecta y correcta,

y nadie tiene vergüenza de decir

“yo amo algo sobre ti” a la última persona

que te inspiraba.

 

Tráeme rosas; las honraré porque sé

que de ti, palabras son flores y las rosas,

son poesía. El rojo es simplemente uno

de muchos colores de la Vida y ha sido

mucho tiempo desde que cualquier hombre

pensaba en llevarme rosas rojas, entonces

llévalas a la casa mía. Soy mujer cuya presencia

hace que las mareas suben y países

reconsideran sus fronteras; no se puede

importar mucho lo que otros piensan

 

porque la impresión que dejo es casi siempre

la equivocada de todos modos.

Entonces, tráeme las rosas, cualquier sabor,

cualquier sonido- olvides a ella. Yo me sentaré

contigo para reírnos; podemos contar las horas

hasta que alguien piense que yo soy tu

amante por haber sido escrito este poema

para ti (no soy- sólo soy mujer que ama

a las flores y quien aprecia a cualquier

hombre, que me las lleve). 

para Carlos, nuestro amigo en poesia